Fiestas que enferman

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Sobre las comidas de las fiestas y el bombardeo infinito de la #AFIPdelaalimentacion





Primero:
cuando hablo de la AFIP de la alimentación me refiero a ese pensamiento “contable” de la nutrición. Ese pensamiento donde el cuerpo es un balance del tipo entran tantas calorías y salen tantas (ingreso vs gasto). Ese pensamiento que te invita a contarlo todo: las calorías, los pasos, las porciones, los kilos. TOOOOODOOOO tiene un número, entonces sos un número.



¿Qué pasa con esto?

Llegamos a diciembre y comenzamos (como todos los años) a ser bombardeadxs con notas de los medios masivos sobre las calorías que tiene tal o cual cosa navideña, cuanto ejercicio tenes que hacer para quemar todo lo que comiste, que dieta podés seguir, etc…

Claro que las personas solemos tener angustia ante semejante nivel de alerta. Si lo dice un profesional en el noticiero es para preocuparse, no?

De repente parece que salen nutricionistas y medicxs de debajo de las baldosas a hablar sobre calorías, a alertar. ¿Acaso unx nutricionista no puede hablar de otra cosa que no sean calorías?

Desde mi humilde lugar, te digo lo mismo que le diría a cualquier persona (incluso a mi misma): Comé lo que se te cante, disfrutalo, no pasa nada. Un día no cambia un cuerpo, no cambia un análisis, no cambia tu estado nutricional.

A mis colegas y a lxs profesionales de la salud en general les recomiendo que si queremos que nos tomen en serio, hay que empezar a hablar serio. Cinco años estudiando que nos habilitan a hablar de salud y alimentación. Hagamos honor a eso. No somos contadores de calorías (no hay materias donde nos enseñen cuantas calorías tiene un pan dulce, eso es una construcción social, sos nutri tenés que hablar de eso.) Rompamos con ese mandato y empecemos a hablar sin enfermar a las personas. El comer no debe nunca generar culpa.

Con respecto a las conductas compesatorias que se proponen (bandera roja total) ocurre lo mismo. Es poco ético comparar las calorías de un turrón con la cantidad de minutos que hay que correr. No veo semejante esfuerzo en los mismos profesionales pero con productos que ellxs mismos promocionan y que son ultraprocesados igualmente.

Yo creo que cada unx sabe lo que su cuerpo necesita y lo que no, y puntualmente no tiene que ver con calorías. Escucha tu cuerpo, te avisa si ya fue demasiada sal o si te estás pasando con el alcohol. Más que nada para que al día siguiente no sientas que te explotó el estómago.

Por todo lo demás disfrutá, evitá opiniones sobre el cuerpo de lxs demás y el tuyo. Hidratate con agua, porque acá hace mucho calor.

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